A veces creemos que: porque
alguien asiste a la iglesia, es un cristiano, pero en realidad en nuestro caminar
encontramos muchas clases de creyentes.
- Los curiosos, son aquellos que están buscando señales, han escuchado hablar de algo extraordinario y quieren comprobar si lo que escucharon es cierto, si de verdad existen milagros y sanidades.
Juan 6:2 “Y le seguía gran multitud, porque veían las señales que hacía
en los enfermos.”
- Los admiradores, son aquellos que reconocen la autoridad de Jesucristo, reconocen la existencia de Dios, pero no existe un verdadero compromiso, ante una palabra dura, ante una prueba… ellos corren.
Juan 6:14 “Aquellos hombres entonces, viendo la señal que Jesús había
hecho, dijeron: Este verdaderamente es el profeta que había de venir al mundo.”
- Los codiciosos, son aquellos que solamente siguen a Dios por los “bendiciones” o los “beneficios” de ser cristianos, podemos decir que estos son los pastores asalariados que se menciona en Juan 10:12. Líderes que buscan lucrar con el evangelio, o buscan posiciones como los fariseos.
Juan 6:26 “Respondió Jesús y les dijo: De cierto, de cierto os digo que
me buscáis, no porque habéis visto las señales, sino porque comisteis el pan y
os saciasteis.”
- Los incrédulos, son aquellos que a pesar de que han visto… milagros, prodigios, señales, han recibido palabra, Dios les habla, han sentido la presencia de Dios, han sido testigos del poder de Dios, pero simplemente no creen… y encuentran cualquier explicación para todo lo sucedido.
Juan 6:36 “Mas os he dicho, que aunque me habéis visto, no creéis.”
- Los murmuradores, son aquellos que cuestionan la palabra, o lo que sucede en la iglesia. Son aquellos que buscan todo lo negativo… solamente para expresar su punto de vista, su malestar y su posición. Lo lamentable del caso es que en ese proceso muchos niegan a Jesucristo.
Juan 6:41 “Murmuraban entonces de él los judíos, porque había dicho: Yo
soy el pan que descendió del cielo.”
- Los de doble ánimo, son aquellos en los que no se puede confiar, se comprometen y luego retroceden.
Juan 6:66 “Desde entonces muchos de sus discípulos volvieron atrás, y
ya no andaban con él.”
- Los verdaderos, son aquellos que han puesto su mirada en el Señor y no retroceden, son aquellos que están firmes en el Señor
Juan 6:68 “Le respondió Simón Pedro: Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes
palabras de vida eterna.”
Podemos ver que todas estas clases
de personas escuchaban al Señor, y si el Señor tenía esta clase de personas, lo
más probable es que te encuentres con ellos en la casa de Dios. Pero no miremos
la paja en el ojo del hermano, examinemos nuestra propia actitud, ¿con cuál te
identificas?