domingo, 1 de septiembre de 2019

Mayordomía

Uno de los problemas más grandes de la humanidad es que somos pésimos administradores, porque no somos tenemos claro de lo que queremos hacer y al no tener un propósito claro no administramos de manera adecuada lo que tenemos, además nadie nos ha enseñado a administrar a pesar que desde que nacemos, estamos administrando cosas: administramos lo que hacemos con nuestro tiempo, lo que hacemos con nuestro cuerpo, con los dones y talentos, administramos los recursos materiales. El cumplir el propósito de nuestra vida depende de la correcta administración de los recursos que se nos ha confiado.

La Biblia nos habla sobre la mayordomía y allí podemos encontrar principios y recomendaciones valiosas para ser buenos administradores de las cosas que Dios nos ha dado. Ser buenos mayordomos debería ser nuestro modo natural de vida.

Normalmente cuando los cristianos hablan de mayordomía, lo relacionan con los diezmos y las ofrendas, pero la mayordomía es mucho más que eso, tener dinero para diezmar y ofrendar es una consecuencia de una buena administración de los otros recursos (tiempo, cuerpo, talentos), para poder tener un concepto cabal de lo que es mayordomía cristiana, vamos a ver los siguientes puntos.

Todo le pertenece a Dios y nosotros somos sus mayordomos

Génesis 1:1 “En el principio creó Dios los cielos y la tierra.”
Para empezar, debemos reconocer que Dios es el creador de todo, por lo tanto, todo le pertenece a Él, esta premisa se establece desde el primer pasaje en la Biblia, no hay nada en este mundo ya sea visible o invisible que no haya sido creado por Dios, y así a lo largo de toda la Biblia podemos encontrar diversos pasajes que reafirman que todo es de propiedad de Dios. Por Ejemplo.

Salmos 24:1 “De Jehová es la tierra y su plenitud; El mundo, y los que en él habitan.”

Una vez establecido que Dios es el dueño de todo ¿qué función cumple el hombre?

Génesis 1:28 “Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra.”

Génesis 2:15 “Tomó, pues, Jehová Dios al hombre, y lo puso en el huerto de Edén, para que lo labrara y lo guardase.”

La Palabra muestra claramente que Dios le confió al hombre su creación, Dios le dio al hombre el derecho de usar, de disfrutar de la creación, pero este derecho tiene restricciones.

Génesis 2:16-17 “Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer; mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás.”

El hombre podía disfrutar de toda la creación, de lo único que no podía disfrutar era del árbol de la ciencia del bien y del mal, este árbol no era malo ni bueno, este árbol era propiedad exclusiva de Dios, y eso pasa con el mayordomo. El dueño entrega todos los bienes al mayordomo para que los use como si fueran suyos, pero hay ciertas restricciones que el mayordomo no puede hacer, hay ciertas cosas que están reservadas solamente para el dueño.

La relación entre el dueño y el mayordomo no es una relación fría ni distante, es más bien una relación muy cercana donde existe tanta confianza que el dueño le entrega sus bienes para que el mayordomo los use como si fueran de su propiedad, la relación es tan cercana entre el dueño y el mayordomo que tienen una misma visión y objetivos. Es precisamente por esta razón que el dueño pone en manos de mayordomo la administración de sus bienes. Por lo tanto el mayordomo usa los bienes como si fueran suyos, pero lo más importante, reconoce que estos bienes no son suyos.

1 Pe. 4:10 “Cada uno según el don que ha recibido, minístrelo a los otros, como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios.”

La Palabra hace énfasis en que cada persona ha recibido algo para administrar, también nos exhorta que administremos de manera adecuada los bienes otorgados por Dios; lo que ha sido entregado por Dios no podemos esconderlo,

Génesis 39:6 “Y dejó todo lo que tenía en mano de José, y con él no se preocupaba de cosa alguna sino del pan que comía…”
El mayordomo se ocupa de una correcta administración de todas las cosas que se le han entregado de una manera eficiente, quitándole carga al dueño, por lo tanto el mayordomo es ayuda no es carga.

Responsabilidades del mayordomo

  • Seguir las instrucciones

Habiendo entendido que el mayordomo no es el dueño de los bienes, por lo tanto, el mayordomo no tiene el derecho de decidir que se hará con las cosas. El mayordomo necesita seguir las instrucciones del dueño, no puede hacer las cosas según su propia opinión. Nosotros no decidimos que hacer con las cosas que se nos ha dado, es Dios quien decide que vamos a hacer con esas cosas, nosotros sólo seguimos sus instrucciones dejadas por Dios, ¿dónde encontramos esas instrucciones?

2 Tim. 3:16 “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,”

Por supuesto a lo largo de toda la Biblia podemos encontrar instrucciones entregadas por Dios, estas instrucciones nos enseñan a ser buenos mayordomos. Lo único que necesitamos hacer es leer la Palabra, conocer las instrucciones y ponerlas en práctica. Un libro fabuloso y práctico es el libro de Proverbios.
Correcta distribución

Mc 12:17 “Respondiendo Jesús, les dijo: Dad a César lo que es de César, y a Dios lo que es de Dios”

Un buen administrador puede hacer una adecuada lectura de la situación en la que se encuentra y de los recursos que tiene a disposición, teniendo esta habilidad el mayordomo puede distribuir de manera adecuada estos recursos.

El buen mayordomo cumple a cabalidad los compromisos económicos: entregando las ofrendas/diezmos a la iglesia, pagando las cuentas pendientes, sin descuidar ninguna de las áreas de la vida económica, para esto necesitamos contar con un presupuesto. Otra vez hacemos énfasis en contar con un presupuesto.

  • Buscar dirección adecuada


Deuteronomio 5:33 “Andad en todo el camino que Jehová vuestro Dios os ha mandado, para que viváis y os vaya bien, y tengáis largos días en la tierra que habéis de poseer.”

Un administrador necesita tener una comunicación fluida con el dueño para recibir instrucciones ante cualquier duda, de la misma manera es importante que nosotros como cristianos estemos en una permanente relación con nuestro Crear mediante la lectura de la palabra, la oración, las prédicas, los consejeros, esta guía es para recibir instrucciones sobre los caminos que debemos seguir.

Salmos 48:14 “Porque este Dios es Dios nuestro eternamente y para siempre; Él nos guiará aun más allá de la muerte.”

Podemos encontrar en las Escrituras como los hombres de Dios cuando estaban en peligro recibían constante dirección de Dios mediante la oración y las ofrendas, pero lo más hermoso es que Dios nos promete que nos va a guiar inclusive más allá de la muerte.

  • Hacer inversiones

Mateo 25:14-17 “Porque el reino de los cielos es como un hombre que yéndose lejos, llamó a sus siervos y les entregó sus bienes. A uno dio cinco talentos, y a otro dos, y a otro uno, a cada uno conforme a su capacidad; y luego se fue lejos. Y el que había recibido cinco talentos fue y negoció con ellos, y ganó otros cinco talentos. Asimismo el que había recibido dos, ganó también otros dos.”

Esta parábola es muy conocida, podemos encontrar que los dos buenos administradores, negociaron, es decir hicieron inversiones para multiplicar lo que se le había dado. Un buen administrador busca multiplicar los recursos que le han sido confiados.

Sólo piensa: si eres dueño de una empresa que vale, por ejemplo, un millón de dólares, lo mínimo que esperas es que, al finalizar la gestión comercial, la empresa valga más de millón, si la empresa vale lo mismo o menos, consideras que el Gerente (administrador) ha realizado una mala gestión. Lo que se espera es que lo despidas.

La inversión no puede ser una sola vez, es necesario realizar inversiones cada cierto tiempo, por ejemplo: si monto un restaurante, invierto una suma fuerte de dinero, y es la gran inauguración: el restaurante esta hermoso, con las paredes pintadas, los manteles nuevos, la vajilla reluciente, pero al cabo de un tiempo se deteriora. Es por eso que de las ganancias necesito apartar un porcentaje para reinvertir, esta reinversión no solamente servirá para reponer lo que se haya deteriorado, sino que servirá para expandir el negocio.

Mateo 25:18 “Pero el que había recibido uno fue y cavó en la tierra, y escondió el dinero de su señor.”

Debemos buscar expansión, El no invertir o no reinvertir, puede ocasionar que el negocio se vaya a la quiebra. El estancamiento comercial será evidente. Pero la preguntar es ¿Por qué las personas no buscan crecer económicamente? ¿Por qué las personas no buscan tener otros emprendimientos?

Mateo 25:25 “por lo cual tuve miedo, y fui y escondí tu talento en la tierra; aquí tienes lo que es tuyo.”

Porque tienen miedo, miedo al fracaso, miedo a salir de la zona de comodidad, miedo a la inseguridad, miedo a intentar hacer algo nuevo, prefieren mantenerse seguras en sus puestos de trabajos, recibiendo su sueldo mensual, pero la verdad es que no hay nada más inseguro que tener una sola fuente de ingreso. ¿Qué pasa si pierdes hoy esta fuente de ingresos? ¿Qué harías si mañana no tienes trabajo y no puedes llevar el sustento a tu casa? ¿Culparías a Dios por ello? Dios no tiene la culpa, no deberíamos depender de una sola fuente de ingreso, de hecho, deberíamos buscar tener varias fuentes de ingresos pasivos. Mientras más ingresos pasivos tengas mejor. Si por algún motivo falla alguno de estos ingresos, puedes contar con los ingresos de los otros ingresos pasivos.

Una fuente de ingreso pasivo es aquella que genera ingreso de forma automática sin que eso suponga una inversión de tiempo. Una vez que se ha puesto en marcha, sigue proporcionando dinero. Ejemplos de ingresos pasivos: casa en alquiler, acciones en una empresa, libros, propiedad intelectual sobre algún invento, alguna canción, negocio donde tengas un administrador.

Otro motivo por el cual las personas no invierten es porque no les han enseñado, vivimos en un sistema donde nos enseñan a ser dependientes, nos enseñan a terminar los estudios y buscar una empresa donde trabajar y buscar una jubilación, no nos enseñan a tener un espíritu emprendedor, no está malo ser dependiente en una empresa, lo malo es conformarse con ello.

Los buenos administradores siempre buscan crecer, expandirse, hay un dicho: “no hay peor gestión que aquella que no se hace”. Aquel mayordomo que no está haciendo gestiones para expandirse, es un mal mayordomo.


  • Informar

Mateo 25:20 “Y llegando el que había recibido cinco talentos, trajo otros cinco talentos, diciendo: Señor, cinco talentos me entregaste; aquí tienes, he ganado otros cinco talentos sobre ellos.”

Como las cosas no son de su propiedad, el mayordomo sabe que en algún momento tendrá que rendirle cuentas de las cosas que le han sido confiadas para administrar. Es importante rendir cuentas ante alguien sobre los bienes que se administran.

Toda persona que maneja un vehículo sabe que no se puede ver todo en los retrovisores, que existe un punto ciego que no puede ver, es por eso que cuando se va a cambiar de carril o se va a doblar además de mirar los retrovisores se debe voltear un poco para asegurarse que no venga nadie y de esta manera evitar accidentes.

De la misma manera todo cristiano también tiene puntos ciegos que no puede ver, viven en la ignorancia de vivir en pecado y de los efectos del pecado en su vida. La clave es la ignorancia que puede cegarte de tus propias faltas. El pecado puede hacerte de la amplitud de los problemas de la vida.

Para esto necesitas informar, para esto necesitas dar cuentas, esto te permite descubrir dónde están las fallas y donde debes corregir para mejorar.


  • Rendición de cuentas


Mateo 5:19 “Después de mucho tiempo vino el señor de aquellos siervos, y arregló cuentas con ellos.”

¿Qué pasaría que hoy Dios te llama a rendir cuentas?, muchos de los que están leyendo en este momento dicen ser cristianos, creen en Cristo, pero viven buscando el propósito de Dios en sus vidas, es por eso que muchos no llegan a cumplir los propósitos de Dios en su vida, porque están buscando satisfacer sus propios deseos.

Génesis 2:24 “Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne.”

La palabra nos enseña que el hombre y la mujer deben uno, un mismo pensar, un mismo sentir, una misma economía, como esposos no debemos tener economías diferentes, al momento de tener diferentes uso del dinero, puede existir la tendencia de ocultar ciertos uso del dinero para fines no apropiados (vicios, mujeres, alcohol, etc). En cambio cuando la economía es una sola, el uso del dinero es transparente, por lo tanto hay alguien que está fiscalizando su uso correcto.

Si no hay un cónyuge, entonces alguno de tus padres te puede ayudar, la ventaja de tener a un padre que te ayude con la administración de tus recursos es la experiencia y sabiduría que puede proporcionarte.
Si no cuentas con un padre, puedes buscar un asesor financiero, no busques a cualquier persona, no busques a cualquier persona, la persona que busques tiene que ser alguien de experiencia y que tenga conocimientos sólidos sobre finanzas y economía. Lo importante de todo esto es que debes buscar a alguien a quien le puedas informar lo que estás haciendo con los recursos que tienes, te pueda orientar y puedas hacer correcciones.

Romanos 14:12 “De manera que cada uno de nosotros dará a Dios cuenta de sí.”

Por si queda alguna duda, al final de los tiempos todos daremos cuentas de nuestra mayordomía a Dios, si no lo hacemos aquí con alguien que nos pueda ayudar a corregir lo que está mal, lo haremos con Dios al final de los tiempos.

Recompensa

2 Corintios 5:10 “Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo, para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo, sea bueno o sea malo.”

Con seguridad que en esta vida seremos recompensados por una buena administración de los recursos que se nos han entregado, pero también seremos recompensados en la vida venidera. No todos
No quiero que pienses en tener un enfoque materialista, de ninguna manera, no todos están llamados a servir a Dios a tiempo completo, pero si estamos llamados a servir a Dios de acuerdo a los dones y talentos que nos fueron otorgados. Por lo tanto algunos estarán llamados a servirle a tiempo completo, otros estarán llamados a servirle a tiempo parcial, aquellos que están llamados a servirle a tiempo parcial, es necesario que busquen un equilibrio entre servirle y generar recursos económicos para sustentar la obra y a sus familias.

De la misma manera que estemos sirviendo a Dios a tiempo completo y con una adecuada administración de los recursos de la organización podremos ver que esta crece y por supuesto no hay mayor recompensa que ver la obra en constante crecimiento, que el reino de Dios se expanda, ver almas salvadas. Y si estamos sirviendo a Dios a tiempo parcial, administrando bien los recursos otorgados veremos también un crecimiento en nuestra familia, nuestra casa, recibiendo la recompensa en este mundo, pero también esperando la recompensa final.

Mateo 5:21 “Y su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor.”

A los buenos administradores de las cosas terrenales Dios los llamará para que entren con Él a la vida eterna.

Mateo 25:30 “Y al siervo inútil echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes.”

En cambio a los malos administradores Dios los apartará de su presencia para siempre.

Requisitos de un mayordomo

Los mayordomos tienen que cumplir con una serie de requisitos, solamente mencionaremos los más importantes.


  • Estar con Dios


Génesis 39:2-5 “Mas Jehová estaba con José, y fue varón próspero; y estaba en la casa de su amo el egipcio. Y vio su amo que Jehová estaba con él, y que todo lo que él hacía, Jehová lo hacía prosperar en su mano. Así halló José gracia en sus ojos, y le servía; y él le hizo mayordomo de su casa y entregó en su poder todo lo que tenía. Y aconteció que desde cuando le dio el encargo de su casa y de todo lo que tenía, Jehová bendijo la casa del egipcio a causa de José, y la bendición de Jehová estaba sobre todo lo que tenía, así en casa como en el campo.”.

El requisito más importante es caminar agarrado de la mano de Dios, cuando se camina agarrado de la mano de Dios, importa la circunstancia, no importan los problemas, no importa la escases, ni la crisis, Dios estará con nosotros y con seguridad habrá prosperidad.

Dios estaba con José, a pesar de que José estuvo en un pozo, fue vendido como un esclavo, sirvió como mayordomo/esclavo, fue acusado injustamente, estuvo en la cárcel, Dios siempre estuvo con José y José con Dios, Dios hizo prosperar a José y lo sacó de la cárcel.

Te aseguro sea cual sea la situación que estés pasando en este momento, es mucho mejor que la de José, por lo tanto Dios puede hacer maravillas contigo, sólo si te mantienes con Él y siendo un buen administrador de lo que se te entregue.


  • Fidelidad

1 Corintios 4:2 “Ahora bien, se requiere de los administradores, que cada uno sea hallado fiel.”

La fidelidad en lo que se te ha encomendado es lo que garantiza que vas a cumplir, si no eres una persona fiel, vas a dejar las cosas tiradas, vas a dejar las cosas a la mitad, vas a dejar las cosas a medias, por lo tanto es importante que seas una persona confiable y que cumplas con todo lo que se te ha encargado.

Lo primero es que se nosotros seremos evaluados de manera individual como administradores, no será una evaluación colectiva, pero para esto lo primero que necesitamos hacer es reconocer que somos siervos del Dios altísimo,


  • Integridad


Job 2:3 “Y Jehová dijo a Satanás: ¿No has considerado a mi siervo Job, que no hay otro como él en la tierra, varón perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal, y que todavía retiene su integridad, aun cuando tú me incitaste contra él para que lo arruinara sin causa?”

Job demostró ser un varón integro, y aunque Satanás destruyó todo lo material que tenía Job, aún así permaneció fiel a sus principios e integridad. Porque valoró más la relación que tenía con Dios que las cosas materiales.

Todo el tiempo estamos tomando diferente clase de decisiones, algunas buenas, otras malas, algunas estarán en función a lo que queremos hacer, otras a lo que debemos hacer. La integridad empieza tomando esas decisiones en función a lo que tenemos que hacer, no importando, el sentir.

Job 2:9 “Entonces le dijo su mujer: ¿Aún retienes tu integridad? Maldice a Dios, y muérete.”

Hay tiempos difíciles para los hijos de Dios, donde nuestra fe será puesta a prueba, hasta las personas que nos aman y están a nuestro lado nos darán la espalda, murmuraran, y tal vez no entendamos porque estamos atravesando estos momentos complicados.

Job 27:5 “Nunca tal acontezca que yo os justifique; Hasta que muera, no quitaré de mí mi integridad.”

Lo importante de todo es mantenerse íntegro hasta el fin. Al final del libro de Job vemos como permaneció integro, y fue recompensado por Dios ya que Dios le restituyó con el doble de todas las cosas que tenía.


  • Sabiduría


2 Crónicas 1:10 “Dame ahora sabiduría y ciencia, para presentarme delante de este pueblo; porque, ¿quién podrá gobernar a este tu pueblo tan grande?”

Salomón entendió que para ser un buen administrador necesitaba conocimiento por eso pide ciencia, pero el conocimiento no basta, también pidió sabiduría, para aplicar de manera correcta el conocimiento: Hoy en día podemos ver que muchos tienen conocimientos científicos especializados, pero no pueden tomar buenas decisiones, el problema es que tienen el conocimiento, pero lo que no pueden hacer es aplicar estos conocimientos de manera adecuada.

En los primeros capítulos de proverbio encontramos que Dios es la fuente de toda sabiduría, por lo tanto es importante buscar siempre la guía de Dios para la toma de decisiones.

Conclusión

Mateo 25:29 “Porque al que tiene, le será dado, y tendrá más; y al que no tiene, aun lo que tiene le será quitado.”

La primera vez que leí este pasaje pensé que Dios era injusto, ¿Por qué Dios iba a quitarle al que tiene poco?, ¿Por qué Dios le quitó el único talento que tenía para dárselo a aquel que tenía más talentos?, todo esto me pareció muy injusto, pero si lo ves desde un punto de vista de un administrador Dios es un Dios justo.

Si Dios te entrega algo y no sabes administrar ese algo que Dios te entrega, si eres negligente, si eres perezoso, si haces lo que quieres, si haces lo incorrecto, por supuesto Dios te lo va a quitar. Ejemplo, si Dios te da un auto y lo administras mal, Dios te lo va a quitar.

Y ¿cómo administro mal mi auto?, Si lo estacionó en lugares donde no debo, si escucho un ruido en el motor y no lo hago arreglar, si veo mis llantas desinfladas o pinchadas y no lo arreglo, si no pago mis impuestos, si lo llevo a lugares que no debo… como boliches, karaokes, etc. Dios va a quitarme la bendición que me da.
Es muy importante que yo aprenda a ser un buen administrador, que entienda que las cosas no me pertenecen y que algún día tendré que dar cuenta del uso que le estoy dando

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