sábado, 21 de noviembre de 2015

El nombre de Dios

Utilizamos muchas palabras para referirnos a Dios, tales como Adonay, Shadday, Elohim, etc. Y cada una de estas palabras refleja una característica de Dios. El nombre de Dios es revelado en la Biblia.
Éxodo 3: 13-14 “Dijo Moisés a Dios: He aquí que llego yo a los hijos de Israel, y les digo: El Dios de vuestros padres me ha enviado a vosotros. Si ellos me preguntaren: ¿Cuál es su nombre?, ¿qué les responderé? Y respondió Dios a Moisés: YO SOY EL QUE SOY. Y dijo: Así dirás a los hijos de Israel: YO SOY me envió a vosotros.”
Y es tan sencillo el nombre de Dios es “YO SOY”, pero ese nombre es en español, no es lo mismo decir “Jorge” en español que “George” en inglés. Y Moisés no hablaba en español, Moisés hablaba en hebreo antiguo, Por lo tanto lo que nos interesa es la pronunciación de YO SOY en hebreo antiguo.
La manera correcta es JEHOVA?, es YAHVE?, o tal vez YAHVEH? antes que nada quiero decir que no sirve de nada para la salvación saber el nombre correcto de Dios, lo importante de todo es que tengamos una relación correcta con Él. Jesucristo nunca mencionó el nombre de Dios, lo que él nos enseñó es la relación que debemos tener con Dios. Una relación de Padre e hijo.
Mateo 6:9 “Vosotros, pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre.”
En primer lugar los israelitas se tomaban muy enserio los mandamientos y si leemos
Éxodo 20: 7 “No tomarás el nombre de Jehová tu Dios en vano; porque no dará por inocente Jehová al que tomare su nombre en vano.”
Ellos conocían el nombre de Dios, pero evitaban usarlo por el profundo respeto que le tenían. Por lo tanto cuando querían referirse a Dios usaban normalmente la palabra “Adonay” que quiere decir “El Señor”; y en el menor de los casos usaban las palabras Shadday, Elohim, etc. Que es la relación que tiene Dios con el hombre.
El nombre de Dios lo usaban solamente la clase sacerdotal en privado, estaba prohibido usar el nombre de Dios en público, porque era un nombre sagrado. Hasta aquí todo bien, pero quedan los escritos.
El problema de los escritos es que en el idioma hebreo antiguo no se usaban las vocales, sólo se escribían las consonantes, por ejemplo el nombre “Federico” se escribiría “Fdrc”, pero el contexto y el conocimiento se conoce que se trata de la palabra “Federico”, por lo tanto lo que se olvidó fueron las vocales que estaban entre las consonantes… ahora sólo tenemos las consonantes.
YHVH, estas consonantes es lo que se conoce como Tetragramatón.
Los masoretas quisieron que sea más fácil aprender hebreo y empezaron a colocar vocales a las palabras, la idea era mantener la correcta pronunciación, mantener la integridad, mantener el significado y el sentido de la palabra; estas vocales se las coloca mediante puntos y lograron hacerlo con éxito con toda la Biblia… excepto con el Tetragramatón. Cuando lidiaron con el nombre de Dios solamente le asignaron las vocales según el contexto de las palabras usuales para Dios:
Elohim (vocales: jataf segol = e (shvá' original por ser 'alef letra gutural); jolam jaser = o y jiriq jaser = i)
Adonay (vocales: jataf patáj = a (shvá' original por ser 'alef letra gutural); jolam jaser = o y qamatz = a)
Ha-shem (vocales del arameo shemá'= Ha-shem “el nombre”): shvá' = e y qamatz = a. “Ha” es el artículo (el, la, los, las), y Shem ‘(re)nombre’.
El traductor español creyó ver en la secuencias letra-vocal del Nombre Divino una real pronunciación, pero eso era sólo una convención al momento de leer el Nombre. Como se puede ver, se concentró en la forma más abundante, YeHoVaH, y de ahí pasó como Jehovah. Algo totalmente muy alejado de la realidad del hebreo.

Hipótesis del origen de la palabra JEHOVA
Ahora tenemos el Tetragramatrón YHVH, el primer error fue copiar la grafía alemana y en ese cambio se cambio la Y por la letra J
YHVH èJHVH
Los masoretas al no poder colocar vocales decidieron usar la palabra “Adonay” ya que era la palabra más común para referirse a Dios y obtuvieron las letras AOAY y la fusionaron con JHVH.
JHVH + AOA è JAHOVAHY
Por razones fonéticas cambiaron la primera A por la letra E y eliminaron la última letra Y.
JAHOVAHY è JEHOVAH

Pronunciación más aproximada
La mayoría de los hebraístas —y algunos eruditos judíos— han acordado en que la pronunciación Yahveh es la más próxima a la original. Aunque insisto no se conoce a ciencia cierta la pronunciación original, porque desapareció (por exceso de reverencia, supersticiones). Hay siglos que no se usa la palabra real y por la particularidad del idioma hebreo antiguo, puesto que su alfabeto no existían vocales escritas, hicieron que la pronunciación exacta se perdiera.

Conclusión

Conocer el nombre real de Dios y como pronunciarlo no te salva, aceptar a Jesucristo en tu corazón, tener una relación con Dios, es lo que te salva.


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