jueves, 4 de enero de 2024

Mi gozo viene de...

 Habacuc 3:17-18 “Aunque la higuera no florezca, Ni en las vides haya frutos, Aunque falte el producto del olivo, Y los labrados no den mantenimiento, Y las ovejas sean quitadas de la majada, Y no haya vacas en los corrales; Con todo, yo me alegraré en Jehová, Y me gozaré en el Dios de mi salvación.”

Existen varios motivos por los cuales pasamos momentos difíciles en la vida, el primero son circunstancias ajenas a nuestro control: un accidente, enfermedad, una mala noticia, crisis político-social, Etc, todas estas cosas afectan nuestras emociones, pueden incluso llegar a turbarnos por un tiempo; también están aquellas en las cuales nos hemos metido ya sea por un mal asesoramiento, malas decisiones, o decisiones fuera de la voluntad de Dios, por supuesto lo más evidente por causa del pecado, pero también están las pruebas que Dios permite en nuestras vidas.

Todas estas circunstancias de una manera u otra, de cierta manera pueden llegar a afectarnos, pero no deberían ser circunstancias que nos alejen de Dios, porque nuestro gozo no depende de que todo nos vaya bien, de que no existan pruebas, de vivamos de sin problemas o situaciones adversas en la vida, eso es ser cristiano de balde, cristiano que solamente busca las bendiciones, pero no busca al que otorga la bendición.

El árbol cuando va creciendo necesita tanto de la lluvia, como del sol, de la sequía y de los vientos, en los tiempos de lluvia son los tiempos de abundancia, de prosperidad, son tiempos en los cuales todo está marchando bien, los tiempos de sol es cuando producimos los frutos, los tiempos de sequía (desierto), es cuando las raíces profundizan en búsqueda de agua, es en esos tiempos de prueba es cuando más deberíamos buscar de Dios, para fortalecer el espíritu; los tiempos de vientos son aquellas pruebas fuertes, pero como somos cristianos maduros, con raíces profundas, ¡nada nos puede tumbar! Pero, si no existen esas raíces profundas, cualquier viento puede tumbarnos.

Habacuc decía no importa la crisis, la situación, lo que mis ojos puedan ver, no importa si estoy en prueba, mi gozo, mi lealtad, mi amor, no depende de cómo estoy viviendo en este momento, porque sé que esto es temporal, mi gozo depende de Dios.

Yo me alegré en Jehová porque sé que estos tiempos de necesidad son momentos en los cuales puedo ver la mano poderosa de Dios actuando; sé que en el desierto puedo ver caer maná del cielo, esa provisión que solamente viene de Dios, puedo ver la nube en el cielo, ese Dios que me protege, esa columna de fuego que me cuida de mis enemigos en la oscuridad.

Mi gozo solamente depende de Dios, creador de los cielos y de la tierra; si tiene el poder para hacer lo que se ve de aquello que no se ve, también tiene el poder para cambiar cualquiera sea la situación que estoy viviendo.

Sabes que es lo que me llama la atención es que en el verso 18: usa la palabra Alegraré (גִּיל guil) y gozaré (עָלַז aláz), palabras que significan girar alrededor, saltar de gozo; me recuerda mucho a la extravagancia de David al gozarse delante de Dios.

No sé por lo que estás pasando, pero si sé que Dios que es momentáneo, enfócate en alegrarte en Dios y en regocijarte, en Él, tal vez digas es difícil hacerlo en tiempos de necesidad, es cierto y tienes toda la razón, pero es sacrificio de alabanza, sacrificio de adoración.

Dile a Dios nada me separará de ti, porque de ti viene mi gozo y mi salvación.


Lee el primer capítulo gratis haciendo click aquí

  

No hay comentarios:

Publicar un comentario