martes, 9 de enero de 2024

Transferencias

 2 Timoteo 1:6 “Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos.”

Por alguna razón Timoteo estaba perdiendo la pasión, ese primer amor hacia Cristo, Pablo al darse cuenta de esa pérdida de entrega, de compromiso, le dice a Timoteo que es su responsabilidad avivar ese fuego en su interior.

Es necesario que entendamos que no podemos crear fuego, pero si podemos avivar el fuego que tenemos en nuestras vidas, antes de avivar el fuego me gustaría que observemos la última frase, el fuego que recibió Timoteo fue producto de una transferencia de parte de Pablo. Pablo fue el responsable de transmitir fe, amor, pasión, compromiso, entrega, hacia Cristo; aquí nos indica que fue producto de una imposición de manos, pero no es la única manera que se puede transferir algo.

Existen muchas maneras que la Biblia nos muestra de una transferencia, una de ellas es la que está en:

Números 11:16 “Entonces Jehová dijo a Moisés: Reúneme setenta varones de los ancianos de Israel, que tú sabes que son ancianos del pueblo y sus principales; y tráelos a la puerta del tabernáculo de reunión, y esperen allí contigo. Y yo descenderé y hablaré allí contigo, y tomaré del espíritu que está en ti, y pondré en ellos; y llevarán contigo la carga del pueblo, y no la llevarás tú solo.”

Aquí podemos ver que Moisés llevaba la carga sólo, era una carga muy pesada, Dios le dijo que 70 ancianos compartirían la carga junto a Moisés, fueron seleccionados de en medio del pueblo.

Números 11:23 “Entonces Jehová respondió a Moisés: ¿Acaso se ha acortado la mano de Jehová? Ahora verás si se cumple mi palabra, o no. Y salió Moisés y dijo al pueblo las palabras de Jehová; y reunió a los setenta varones de los ancianos del pueblo, y los hizo estar alrededor del tabernáculo. Entonces Jehová descendió en la nube, y le habló; y tomó del espíritu que estaba en él, y lo puso en los setenta varones ancianos; y cuando posó sobre ellos el espíritu, profetizaron, y no cesaron.”

Hay dos cosas importantes en esta historia, en primer lugar, dice que la mano de Dios no se ha acortado, Dios sigue siendo el mismo, si lo hizo en el pasado también lo hará en el presente, en Hechos 2:17, dice Dios: derramaré en tiempo futuro, no solamente es el pasado, es en todo tiempo, Él quiere derramar de su Espíritu en toda carne, para profetizar, ver visiones, tener sueños, en segundo lugar, es el mismo Espíritu que reposaba en Moisés reposa hoy en día en los hombres entregados y consagrados a Dios.

Cuando estás al lado de un hombre se transfiere la unción que carga, el Espíritu que lleva, por eso se habla de ADN espiritual, se habla de que el discípulo se parece al maestro, es importante que escojas bien a tu mentor, a maestro, a tu pastor, porque vas a llevar la misma unción. Si el hombre es apasionado por Dios, esa misma pasión se va a transferir, pero también se va a transferir la religiosidad, el legalismo, se transfiere todo, se transfiere lo bueno, pero también se transfiere lo malo.

Si estás con personas que solamente hablan, murmuran, ven el lado malo de las cosas, eso vas a recibir.

Aprende a elegir tus amistades, tus mentores, tu pastor, tu líder, para que recibas lo que ese hombre carga. Elije personas mejores a ti, para que ayuden a ser mejores.

Dios te bendiga


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1 comentario:

  1. Gloria a Dios, que impactante como Dios tomo el espiritu de el y lo transfirio a los 70 ancianos. Y la reacción inmediata de estos bajo ese espiritu !! Gloria a Dios !!

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